viernes, 12 de mayo de 2017

EN RECONSTRUCCION

  Existen personas que a lo largo del tiempo nos lastiman, esas personas que día a día dejan de fingir lo que realmente son y llega un punto en el que no aguantan más y demuestran la verdadera cara de la moneda. Cuando se llega a descubrir esto el dolor es tan grande, que llegamos has a  desilusionarse de nosotros mismos y desconfiamos hasta de la sombra que nos acompaña, es tan cruel reconocerlo y más cuando llegas a sentir un gran aprecio por esa persona, ese dolor es inmenso, te sientes frágil, con una gran impotencia, flagelado nuestros corazones se quedan partidos en piezas tan pequeñas que sentimos que no existirá nada ni nadie que pueda repararlo, pero la realidad es otra y es tan cierto ese dicho que dice que “Existe un roto para un descosido”  que cuando aparece ese roto a cocer esas piezas pequeñas en tu alma todo vuelve a transformase de una manera en la que ni tú mismo eres capaz de ver, ese momento en el que no necesitas terapias, ni tiempos, ni retiros espirituales para encontrarte a ti mismo, simplemente sucede en el momento adecuado, quizá sea como la recompensa después de haber luchado contra una batalla corta o larga, dura o blanda pero que termino destruyendo ese corazón que ahora comienza a sanarse. Y es ahí en donde cierras el libro anterior para comenzar a escribir una nueva y mejor historia.


Resultado de imagen para cosiendo el corazon